Tras llegar a Pisco a la hora de cenar nos instalamos en la confortable casita que habíamos alquilado junto a la playa, un alojamiento sencillo pero limpio y con todo lo necesario para una cómoda estancia de dos noches.
Zonotrichia capensis (gorrión copetón o chingolo común), Pisco. |
El intenso canto de los gorriones copetones nos anunció el fin del reconfortante descanso. Tras un sabroso desayuno nos encaminamos hacia Paracas con la intención de embarcar a las ocho de la mañana con destino a las Islas Ballestas.
Actitis macularius (andarríos maculado), Paracas. |
Durante nuestro recorrido por la carretera hacia Paracas, que transcurre a orillas del Pacífico, pudimos ir deleitando nuestros ojos con una innumerable cantidad de pelícanos, limícolas y gaviotas que hacían presagiar una intensa jornada faunística.
Haematopus palliatus (ostrero negro nosteamericano), Paracas. |
Tras presentarnos en la oficina del operador con el que realizaríamos el tour a las Islas Ballestas y confirmar nuestro pasaje, nos aprestamos, sin mucho convencimiento por la premura de tiempo, a acercarnos a la playa para intentar observar y fotografiar algunas aves, pero la exuberancia vital de estas tierras nos deparaba la posibilidad de iniciar la jornada con tres primicias, el andarríos maculado, el ostrero negro norteamericano y la gaviota cabecigrís. ¡Que placer empezar así el día!
Larus cirrocephalus (gaviota cabecigrís), Paracas. |
Rápidamente nos llamaron para embarcar, la lancha, con sendas filas de tres asientos por lado y con más de cincuenta personas a bordo, no procuraba las mejores condiciones para intentar obtener alguna buena foto pero, que duda cabe, al menos lo iba a intentar.
Nycticorax nycticorax (martinete común), Paracas. |
Antes de salir del puerto ya se presentó la oportunidad de probar, algo lejos y en movimiento..., había que estar preparado para lo que pudiese llegar.
El Candelabro, Paracas. |
No muy lejos del puerto, en la ladera costera de la Península de Paracas, lucía espectacular El Candelabro, un enorme petroglifo muy similar a los de la no muy lejana Nasca.
Pelecanus thagus (pelícano peruano), Paracas. |
Bajo el petroglifo, no menos majestuoso, un pelícano alcatraz o peruano nos regaló algunas instantáneas.
Phalacrocorax bouganvillii (cormorán guanay), Islas Ballestas. |
A partir de ese momento y hasta llegar a nuestro destino en las Islas Ballestas todo resultó un monumental espectáculo de cormoranes, biguás y guanays, ...
Phalacrocorax brasilianus (cormorán biguá), Islas Ballestas. |
y, por supuesto, de los impresionantes piqueros peruanos.
Sula variegata (piquero peruano), Islas Ballestas. |
Que tremendo y emocionante espectáculo, algo increíble que os recomiendo vivir en primera persona, ya que las fotografías de este humilde aficionado no plasman, ni de lejos, lo que pudimos admirar.
Sula variegata (piquero peruano), Islas Ballestas. |
Conmovidos por lo que acabábamos de sentir llegamos a Las Ballestas y allí, como esperándonos para darnos la bienvenida, nos encontramos con los pingüinos de Humboldt.
Spheniscus humboldti (pingüino de Humboldt), Islas Ballestas. |
Spheniscus humboldti (pingüino de Humboldt), Islas Ballestas. |
Tampoco tardamos demasiado en disfrutar de la exhuberante belleza que nos mostraban los charranes incas...,
Larosterna inca (charrán inca), Islas Ballestas. |
Larosterna inca (charrán inca), Islas Ballestas. |
... y, como no, los piqueros peruanos que momentos antes nos habían atalantado con sus inverosímiles picados, se mostraban tranquilos en su colonia tras los vertiginosos lances de pesca.
Sula variegata (piquero peruano), Islas Ballestas. |
Sula variegata (piquero peruano), Islas Ballestas. |
Sula variegata (piquero peruano), Islas Ballestas. |
Ufff, hay días en los que realmente vale mucho la pena madrugar ;). Pero las Islas Ballestas aun nos deparaban algunas sorpresas más...
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Otaria flavescens (lobo marino sudamericano), Islas Ballestas. |
..., los formidables lobos marinos sudamericanos. Cientos de ellos en los peñascos que daban al mar, tranquilos, dormitando, confiados y seguros por la abundancia de alimento de estas generosas aguas.
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Una auténtica barbaridad, un disfrute continuo para los sentidos, un tremendo hervidero de vida allí donde mirásemos.
Phalacrocorax bouganvillii (cormorán guanay), Islas Ballestas. |
Phalacrocorax bouganvillii (cormorán guanay), Islas Ballestas. |
Phalacrocorax bouganvillii (cormorán guanay), Islas Ballestas. |
Y así, emocionados e impresionados, volvió la embarcación a arrumbarse hacia Paracas donde aun nos quedaba mucho por descubrir.
Cathartes aura (gallinazo de cabeza roja), Paracas. |
Tras un rápido tentenpié subimos al autobús con el que recorreríamos parte de la desértica península de Paracas. Nuestra primera escala fue, como no, el magnífico centro de interpretación del parque que nos permitió obtener una visión bastante completa de lo que íbamos a ver.
Cathartes aura (gallinazo de cabeza roja), Paracas. |
En los distintos miradores elevados en los que paramos para poder observar la brutal belleza de este paraje, cicleando en las térmicas, pudimos deleitar nuestros ojos con el impecable vuelo de los gallinazos de cabeza roja y de algún que otro pelícano peruano que iba y venía en busca del sustento.
Pelecanus thagus (pelícano peruano), Paracas. |
Sin apenas darnos cuenta llegó la hora de comer y, como no podía ser de otro modo, pescados y mariscos presidieron todas las mesas. Día de ingesta de vitamina B12 para las personas vegetarianas de nuestra expedición.
Larus belcheri (gaviota peruana), Paracas. |
Desde la techumbre de la terraza del restaurante una joven gaviota peruana vigilaba los contenidos de nuestros platos, ...
Larus belcheri (gaviota peruana), Paracas. |
...por lo que hasta desde la mesa tuvimos ocasión de seguir con nuestro festival ornitológico. Algo más allá otra pareja de adultos también oteaba el ir y venir de nuestras viandas.
Numenius phaeopus (zarapito trinador), Paracas. |
Mientras, en la playa de enfrente, un zarapito trinador recorría la orilla en busca de algún bocado que llevarse a la boca.
Arenaria interpres (vuelve piedras común). Paracas. |
Y aun antes de subir al autobús, en una pequeña playa repleta de algas junto al aparcamiento, pudimos disfrutar de la belleza del vuelvepiedras.
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Ya de vuelta, en Paracas, a pesar de la gran cantidad de gente que poblaba el paseo marítimo, nos acercamos a la playa a ver si seguíamos teniendo a la diosa fortuna de cara y podíamos continuar disfrutando con la observación de alguna especie más.
Egretta thula (garceta nívea). Paracas. |
Una garceta nívea y un precioso pelícano alcatraz hicieron las delicias de mi teleobjetivo.
Pelecanus thagus (pelícano peruano), Paracas. |
Pelecanus thagus (pelícano peruano), Paracas. |
Pelecanus thagus (pelícano peruano), Paracas. |
Y ya, subiendo a nuestro coche para volver hacia Pisco, una zenaida peruana...
Zenaida meloda (zenaida peruana), Paracas. |
... y un gorrión copetón, se despidieron de nosotros invitándonos a volver, seguro que para estar más tiempo, a este precioso lugar que es Paracas.
Zonotrichia capensis (gorrión copetón o chingolo común), Pisco. |
Si quieres ver más fotos de esta espectacular jornada pincha aquí, también encontrarás alguna de las fotos que hicimos en el humedal de Pisco al atardecer de este día, pero que ya contaré en el siguiente episodio.
Me encanta tu blog. Y el nombre una maravilla. Saludos.
ResponderEliminarMuchas gracias, era una antigua iniciativa que se vio truncada por distintas circunstancias y que ahora he podido volver a retomar. Un cordial saludo.
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