Ayer mientras volvíamos de Gallocanta Chema recibió un mensaje en el que un compañero de la SVO, societat valenciana d'ornitologia, comentaba sus avistamientos en el embalse de Loriguilla, entre otras especies cormorán grande, garza real, somormujo lavanco y acentor alpino.
Acentor alpino, caramba, con las ganas que le tengo yo a este bichico..., así que hoy, después de almorzar en la tasca Los Romanes con los compañeros de la Plataforma 14 de Abril de Puçol, hemos cogido los trastos y nos hemos encaminado al embalse de Loriguilla,
Desde que abandoné en el garaje las piraguas no había vuelto por allí y de eso hace, uf. En un rato andábamos por Loriguilla y, tal y como me había comentado Chema, hemos aparcado el coche en el entorno de la presa para dar inicio a la espera del deseado acentor alpino.
Eva, dado que ya llevábamos un rato y por allí no aparecía ni una tarabilla europea, ha decidido echar una cabezadita mientras yo continuaba oteando los alrededores en busca de nuestros amigos. Nada de nada, seguramente el paso más o menos continuado de gente ha provocado que todos los habitantes de la zona se hayan escondido o marchado a espacios más tranquilos. A pesar de ello ha habido una "atrevida" hembra de curruca capirotada que discretamente se ha asomado a saludarme.
Cuando Eva se ha despertado hemos decidido dar un paseo por la zona, aunque antes nos hemos asomado a la barandilla de la presa para echar un vistazo al numeroso grupo de somormujos lavancos que nadaban a sus anchas por el embalse.
En nuestro paseo por el cañón del río Turia hemos visto y oído algunos, pocos, habitantes del fantástico bosque de ribera que lo circunda; verdecillos, lavanderas blancas, pinzones vulgares, carboneros y algún petirrojo europeo.
Tras algo más de una hora de paseo nos ha entrado el apetito y, evidentemente, nos hemos encaminado a buscar un "comedero". Como nuestra intención era volver tras la comida no hemos ido más allá de Losa del Obispo, Casa Anselmo, si os gusta la carne a la brasa...
La sobremesa la hemos llevado de nuevo a las replacetas de la presa para intentar localizar al acentor alpino, la sobremesa y la hora de la siesta pero ni aun así. Menos mal que un precioso ejemplar de petirrojo europeo ha decidido amenizarnos la tarde con sus idas y venidas....
Creo que hoy no era el día así que... ya tengo excusa para volver al embalse de Loriguilla y si no aparece el acentor alpino, siempre nos quedará nuestro simpático amigo el petirrojo europeo.
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